DIAS DE ESCUELA

Con la caída del otoño, algo más significativo que el cambio de los colores de las hojas, algo aún más substancial que el recorrer del aire entre cada espacio vacío, parece ocurrirme. No es el cambio de estación. La naturaleza tiene en si, una forma súbita de marcar las paginas del libro de nuestras vidas. Es ver cada uno de mis pequeños acercarse un poco más a su destino de hombres, alejándose un poquito más a esos días de infancia e inocencia para crecer, enfrentarse a su propio mundo.

Y ahí parada a la baranda del mio propio,el único que hasta ahora he sabido ofrecer; los observo cada otoño al alejarse de mi, llevarse un pedacito de mi corazón.